México es el segundo país de la OCDE con el mayor porcentaje de gasto de bolsillo en salud. El gasto de bolsillo en enfermedades crónicas puede condicionar a una familia a caer en pobreza. Mientras que el gasto de bolsillo de los mexicanos es uno de los más altos en el mundo, el presupuesto de la Secretaría de Salud ha decrecido más del 20% en términos reales durante el sexenio. Si una familia promedio tuviera que pagar el total del tratamiento de diabetes, tendría que endeudarse y/o vender su patrimonio. En el escenario más conservador, los hogares afectados por una enfermedad crónica podrían tener un gasto de bolsillo del 20%. En este caso, las pérdidas de ingreso podrían alcanzar el 1% del PIB. El ingreso perdido por los hogares afectados por enfermedades crónicas, proyectado a 2030, equivale a 7.3 veces el presupuesto de la UNAM. México está al borde de una crisis de salud pública. El país tiene una epidemia de obesidad, de acuerdo a la Organización para la Cooperación y el Desarr